El petróleo y el gas natural son sectores importantes en el mercado de la energía y desempeñan un papel determinante en la economía mundial como principales fuentes de combustible. Los procesos y sistemas que intervienen en la producción y distribución de petróleo y gas son muy complejos, exigen mucho capital y requieren tecnología punta.

El sector suele dividirse en tres segmentos:

  • Upstream, la actividad de exploración y producción de petróleo y gas.
  • Midstream, transporte y almacenamiento.
  • Downstream, que incluye el refinado y la comercialización.

UPSTREAM: PRODUCCIÓN Y EXPLORACIÓN

El segmento upstream del sector del petróleo y el gas comprende las actividades de exploración, que incluyen la realización de estudios geológicos, la obtención de derechos sobre la tierra y las actividades de producción, que consisten en perforaciones en tierra y en alta mar.

Exploración

La exploración de petróleo y gas comprende los procesos y métodos de localización de zonas potenciales para la perforación y extracción de petróleo y gas. Las prospecciones geológicas se llevan a cabo con diversos medios, desde pruebas del subsuelo para la exploración en tierra hasta imágenes sísmicas para la exploración en alta mar. Las empresas de energía compiten por el acceso a los derechos mineros concedidos por los gobiernos, ya sea mediante un acuerdo de concesión, por el que el petróleo y el gas hallados son propiedad exclusiva de los productores, o un acuerdo de reparto de la producción, por el que el gobierno conserva la propiedad y los derechos de participación. La exploración es muy arriesgada y costosa, y en ella intervienen principalmente fondos corporativos. Sin embargo, cuando un lugar de exploración da buenos resultados y la extracción de petróleo y gas es productiva, los costes de exploración se recuperan y tienen un impacto significativamente menor con respecto a otros costes de producción.

Producción

La producción de petróleo y gas es uno de los sectores más exigentes en cuanto a capital, y requiere equipos costosos y mano de obra altamente cualificada. Una vez que una empresa identifica dónde se encuentra el petróleo o el gas, se empieza por perforar. Muchas empresas de petróleo y gas contratan a empresas especializadas en perforación, a las que pagan la mano de obra y los días de perforación. Aunque todas las plataformas de perforación tienen los mismos componentes esenciales, los métodos de perforación varían según el tipo de petróleo o gas y la geología del lugar.

  • EN TIERRA: en las instalaciones de perforación en tierra, los pozos se agrupan en un yacimiento. El grupo de pozos está conectado por tubos de acero al carbono que envían el petróleo y el gas a una instalación de producción y procesamiento, donde se tratan las materias primas mediante un proceso químico y de calentamiento. Las empresas de producción en tierra pueden conectar y desconectar las plataformas más fácilmente que las de alta mar para adaptarse a las condiciones del mercado.
  • OFFSHORE: la perforación offshore utiliza una única plataforma fija (apoyada en el fondo) o móvil (flotante asegurada con anclas). Las perforaciones en alta mar son más caras que las terrestres, al igual que lo son las plataformas fijas con respecto a las móviles. La mayoría de las instalaciones de producción se encuentran en las costas cercanas a las plataformas marinas.
  • FRACTURACIÓN HIDRÁULICA: el fracking, o fracturación hidráulica, es una técnica en la que se utiliza un líquido a alta presión para extraer petróleo o gas de formaciones geológicas. El empleo de la fracturación hidráulica ha incrementado la capacidad de recuperar gas, seguido de petróleo, de zonas en pozos perforados que eran inaccesibles, además de extracciones de pozos de carbón, formaciones de arenas compactas y formaciones de esquisto.

MIDSTREAM: TRANSPORTE

El sector midstream abarca el transporte, el almacenamiento y la comercialización de crudo, gas natural y productos refinados. El petróleo sin refinar se transporta por dos vías principales: los petroleros, que recorren rutas marítimas interregionales, y los oleoductos, por los que circula la mayor parte del petróleo al menos durante una parte del trayecto. Una vez extraído el crudo y separado del gas natural, los oleoductos transportan los productos a otro transportista o directamente a una refinería. A continuación, los productos petrolíferos van de la refinería hasta el mercado en cisternas, camiones, vagones cisterna u otros oleoductos.

MODOS DE TRANSPORTE

El crudo se transporta desde la boca del pozo hasta la refinería mediante camiones cisterna, oleoductos, camiones y trenes. El gas natural se transporta por gasoductos y buques de transporte de gas natural licuado (GNL).

  • PETROLEROS: hay varios tipos de buques cisterna, como petroleros, buques cisterna para carga diversificada (buques de productos químicos) y buques de carga combinados (diseñados para transportar crudo o cargas sólidas a granel). Los buques cisterna se clasifican según los distintos tipos, y las tres categorías más comunes son los petroleros de crudo, los petroleros de productos (que pueden transportar combustibles limpios, por ejemplo, gasolina, y sucios, por ejemplo, hidrocarburos negros) y los buques cisterna para carga diversificada (productos químicos). Los petroleros de crudo se clasifican como VLCC (Very Large Crude Carriers o gran petrolero) o ULCC (Ultra Large Crude Carriers o superpetrolero) y están diseñados para transportar grandes cantidades de crudo por rutas marítimas largas y muy transitadas. Además, se utiliza el «aligeramiento», es decir, la descarga o transferencia de crudo de grandes petroleros a otros más pequeños, para que los buques puedan entrar en puertos de menores dimensiones.
  • OLEODUCTOS: los oleoductos pueden designar sistemas de recolección (de la boca del pozo a las instalaciones de procesamiento), líneas de transmisión (de las zonas de suministro a los mercados) o gasoductos de distribución (los más comunes para transportar gas natural a unidades de consumo medianas o pequeñas). Los oleoductos desempeñan un papel muy importante en el proceso de transporte porque por ellos circula la mayor parte del crudo durante al menos una parte del trayecto. Una vez separado el crudo del gas natural, los oleoductos lo conducen a otro transportista o directamente a una refinería. A continuación, los productos petrolíferos van de la refinería hasta el mercado en cisternas, camiones, vagones cisterna u oleoductos. La planificación estratégica consiste en determinar las rutas más cortas y económicas donde construir los oleoductos, el número de estaciones de bombeo y de compresión de gas natural a lo largo de la línea, y las instalaciones de almacenamiento en las terminales, de modo que el crudo de casi cualquier yacimiento pueda enviarse a cualquier refinería a demanda. Los oleoductos offshore conllevan más riesgos de fugas e impacto ambiental que los terrestres, pero los avances tecnológicos en el material de los oleoductos y los sistemas de control han aumentado su seguridad y eficacia.
  • CISTERNAS DE GNL: las altas presiones y las explosiones dificultan el transporte de gas natural comprimido en cisternas. Gracias a los avances científicos, el gas natural puede convertirse en líquido a temperaturas extremadamente bajas y transportarse como gas natural licuado (GNL). Los buques de transporte de GNL están especialmente diseñados con doble casco para permitir el transporte de agua de lastre adicional, ya que el GNL es más ligero que la gasolina y ofrece más ventajas de seguridad.
  • CAMIONES CISTERNA: históricamente, el ferrocarril ha sido el principal medio de transporte de petróleo. Hoy en día, el ferrocarril compite con los oleoductos; a pesar de ser generalmente una solución más cara, la infraestructura ferroviaria ya existente constituye una ruta alternativa más flexible cuando los oleoductos están al límite de su capacidad. Muchos productos petrolíferos se transportan de las refinerías a los mercados en camiones cisterna o vagones cisterna. Los camiones cisterna distribuyen gasolina a las estaciones de servicio y combustible de calefacción a los hogares.
  • ALMACENAMIENTO: el almacenamiento de petróleo y gas natural ayuda a mitigar las discrepancias entre la oferta y la demanda. Las empresas almacenan más cantidad cuando los precios son más bajos de lo que les gustaría y la recuperan cuando son más altos. El método de almacenamiento más barato son los espacios subterráneos, como los yacimientos agotados. Este método se utiliza sobre todo para el gas natural; la normativa no permite almacenar productos petrolíferos acabados en espacios naturales subterráneos. Los depósitos en superficie se utilizan para el petróleo crudo y refinado, los productos petrolíferos acabados y el gas natural. En los puntos de venta minorista, como las gasolineras, los depósitos se almacenan bajo tierra por cuestiones de seguridad. Los buques cisterna se utilizan para el almacenamiento temporal cuando el almacenamiento terrestre está al límite de su capacidad, lo que los convierte en la opción más cara.

DOWNSTREAM: REFINADO Y COMERCIALIZACIÓN

El sector downstream abarca el refinado y la comercialización. Aunque el refinado es un proceso complejo, el objetivo es sencillo: extraer crudo, prácticamente inutilizable en su estado natural, y transformarlo en productos petrolíferos utilizados para diversos fines, como calentar los hogares, abastecer de combustible a los vehículos y fabricar plásticos petroquímicos. Las refinerías suelen estar situadas cerca de los núcleos de población para facilitar la comercialización y distribución de los productos finales. La comercialización es la distribución mayorista y minorista de productos petrolíferos refinados a empresas, sectores industriales, administraciones públicas y consumidores públicos.

Por lo general, el crudo y los productos petrolíferos se destinan a los mercados que aportan mayor valor al proveedor, lo que suele significar que el mercado más cercano es el primero debido al menor coste de transporte y a los mayores ingresos netos para el proveedor. No obstante, en la práctica, el flujo comercial puede no seguir este patrón debido a otros factores, como las configuraciones de refinado, la variedad de la demanda de productos y las especificaciones de calidad de los mismos.

TRANSFORMADORES DE TIPO SECO DE TMC PARA EL SECTOR DEL PETRÓLEO Y EL GAS

TMC Transformers SpA es una empresa muy reconocida en la fabricación de transformadores de tipo seco con relaciones y presencia para dar cobertura a su negocio en todo el mundo. Gracias a la experiencia adquirida en diferentes sectores del mercado, TMC está en condiciones de ofrecer una solución adecuada de transformadores de tipo seco para muchas Según la breve descripción del sector del petróleo y el gas, es fácil comprender que existen muchas aplicaciones para los transformadores de tipo seco, pero también hay requisitos específicos y muy exigentes. En el sector offshore, las exigencias de seguridad y fiabilidad son especialmente estrictas. Tanto si se trata del suministro de energía para las dependencias de la tripulación, como de la alimentación eléctrica del módulo de perforación o de los compresores de producción, se exigen las normas más estrictas. Las instalaciones pueden estar en plataformas de perforación, de producción o en cualquier plataforma flotante de almacenamiento y descarga de la producción (FPSO).

No hay ningún otro campo en el que las expectativas sobre el material utilizado sean tan altas como en las instalaciones offshore, que pueden estar en plataformas de perforación, plataformas de producción o en cualquier plataforma flotante de almacenamiento y descarga de producción (FPSO). Los transformadores de tipo seco de TMC son excepcionalmente seguros y fiables. Tanto las propiedades eléctricas como mecánicas de esta tecnología garantizan la máxima fiabilidad y permiten su uso en prácticamente cualquier entorno. Dado que casi no se utilizan materiales inflamables durante el proceso de fabricación, la tecnología de tipo seco es muy recomendable cuando existe riesgo de incendio y explosión. En las plantas terrestres, los equipos están expuestos a condiciones muy diferentes. Como las plantas de producción pueden estar situadas tanto a temperaturas muy bajas como muy altas, la estabilidad mecánica y la protección contra las condiciones ambientales son de especial importancia.

TECNOLOGÍA DE TMC

La tecnología H-Art 180°C y el producto homologado según las clases E4, C3 y F1del transformador de tipo seco de TMC es la solución adecuada para condiciones ambientales exigentes.

Por su ubicación habitual en zonas costeras, las instalaciones de terminales de petróleo y gas conllevan exigencias especiales en cuanto a corrosión y grado de protección. Los transformadores de tipo seco de TMC ya disponen de muchas referencias en estas condiciones de trabajo para soluciones con envolvente de hasta IP56 y para instalación en exteriores.

En cuanto a la refinería, existen diversas aplicaciones para los transformadores, en las que el cliente demanda requisitos muy dispares. Por un lado, se requieren transformadores de distribución estándar para el suministro general de energía y, por otro, diferentes transformadores especiales para los sistemas de accionamiento de las bombas y compresores que pueden instalarse en una amplia variedad de condiciones ambientales.

En este caso, los transformadores de tipo seco de TMC ofrecen la flexibilidad necesaria y décadas de experiencia. Dado que TMC Transformers SpA fabrica tanto transformadores estándar como especiales, podemos ofrecer una solución adecuada para cada necesidad y una solución certificada para zonas peligrosas Zona 1 y Zona 2 conforme a las normas IEC ATEX.

Tanto en barcos como en oleoductos terrestres y en alta mar, la disponibilidad es de particular importancia en el transporte de petróleo y gas. Teniendo en cuenta que los transformadores de tipo seco son productos que prácticamente no requieren mantenimiento, TMC Transformers puede garantizar una mayor disponibilidad del transformador.